No te fuerces a caer en la depresión, no te enfades hasta enfermarte. Estás vivo, pero a pocas personas les importa, y después de tu muerte, a pocos les quedará tu recuerdo. Lo que puede herirte nunca ha sido la crueldad de los demás, sino tus propias expectativas fantasiosas. La mejor manera de protegerte es no sobreestimar tu importancia en la vida de los demás. No esperes, no anheles, no cuentes con nada, y no te decepcionarás. Conviértete en una persona tranquila; para aprender esta lección, tendrás que llorar mucho. Reflexionar está bien, pero nunca te aferres a lo negativo. Mantén una actitud optimista y positiva, ¡sin duda llevarás una vida próspera!
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
No te fuerces a caer en la depresión, no te enfades hasta enfermarte. Estás vivo, pero a pocas personas les importa, y después de tu muerte, a pocos les quedará tu recuerdo. Lo que puede herirte nunca ha sido la crueldad de los demás, sino tus propias expectativas fantasiosas. La mejor manera de protegerte es no sobreestimar tu importancia en la vida de los demás. No esperes, no anheles, no cuentes con nada, y no te decepcionarás. Conviértete en una persona tranquila; para aprender esta lección, tendrás que llorar mucho. Reflexionar está bien, pero nunca te aferres a lo negativo. Mantén una actitud optimista y positiva, ¡sin duda llevarás una vida próspera!