Una ballena dormida acaba de despertar. Alguien tiene 1.000 BTC que no se han movido desde 2011, cuando ese alijo apenas valía cuatro mil dólares. ¿Avanzamos catorce años? Esa misma cantidad ahora supera los $89 millones. Es increíble cómo la paciencia da sus frutos en este juego.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
6 me gusta
Recompensa
6
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
MEVHunter_9000
· hace21h
Joder, ¿este tío hace trece años tenía cuatro mil pavos de sobra y ahora tiene noventa millones? ¿Debería aprender de él y tumbarme a no hacer nada o debería llorar?
Ver originalesResponder0
SellTheBounce
· hace21h
Es posible que esta ballena haya tenido que mantenerlo hasta ahora a la fuerza y que ya se haya olvidado de que aún tiene esta posición. La verdadera paciencia no es esperar deliberadamente, sino simplemente no acordarse en absoluto.
Ver originalesResponder0
ForkMonger
· hace21h
nah, esto es solo teatro de sesgo de supervivencia... ¿y qué hay de las implicaciones de gobernanza cuando ballenas como esta realmente se mueven? Ahí es donde ocurre la verdadera prueba de estrés del protocolo. Un dumping de 1000 BTC podría exponer todas las vulnerabilidades de liquidez que hemos estado fingiendo que no existen, jajaja.
Ver originalesResponder0
ProofOfNothing
· hace21h
Joder, ¿13 años sin moverlo? Hay que tener una fortaleza mental increíble, yo hace tiempo que habría vendido con pérdidas y me habría largado.
Ver originalesResponder0
BottomMisser
· hace22h
Joder, este tío no ha tocado nada en catorce años, ¿se despierta y ha multiplicado por veinte mil? Yo todavía estoy intentando comprar en el suelo y pillando cuchillos cayendo.
Una ballena dormida acaba de despertar. Alguien tiene 1.000 BTC que no se han movido desde 2011, cuando ese alijo apenas valía cuatro mil dólares. ¿Avanzamos catorce años? Esa misma cantidad ahora supera los $89 millones. Es increíble cómo la paciencia da sus frutos en este juego.