Últimamente circula mucho en el sector una historia bastante comentada: el problema de salud de Bao Er Ye, que supuestamente está relacionado con el proyecto MuMU de origen de Oriente Medio.
La historia es así: cuando se estaba organizando este proyecto, Bao Er Ye tomó la dura decisión de enviar casi toda su participación a la “black hole”, destruyendo directamente 77.770.000 tokens y quedándose solo con 8.880.000 para sí mismo. ¿Y los 44.440.000 tokens de cierto gran inversor del sector? Siguen ahí, en su cartera.
Lo más curioso es que esta moneda nunca llegó a despegar del todo. Hasta que salió a la luz el asunto de Abu Dabi y, de repente, el precio empezó a subir.
Algunos dicen que es una coincidencia, otros creen que detrás hay algo mucho más turbio. Capital de Oriente Medio + mecanismo de quema de tokens + una noticia positiva inesperada; la combinación, desde luego, es interesante. Pero la verdad de todo esto, probablemente solo la sepan los implicados.
Así es el mercado: a veces, una sola noticia puede cambiar el destino de la distribución de los tokens.
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NotGonnaMakeIt
· 12-11 15:18
El mercado, en definitiva, es la naturaleza humana
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LightningClicker
· 12-11 07:07
Una apuesta abierta no es mejor que una posición oculta
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· 12-10 05:08
El mercado es mucho más complejo de lo que se imaginaba
Últimamente circula mucho en el sector una historia bastante comentada: el problema de salud de Bao Er Ye, que supuestamente está relacionado con el proyecto MuMU de origen de Oriente Medio.
La historia es así: cuando se estaba organizando este proyecto, Bao Er Ye tomó la dura decisión de enviar casi toda su participación a la “black hole”, destruyendo directamente 77.770.000 tokens y quedándose solo con 8.880.000 para sí mismo. ¿Y los 44.440.000 tokens de cierto gran inversor del sector? Siguen ahí, en su cartera.
Lo más curioso es que esta moneda nunca llegó a despegar del todo. Hasta que salió a la luz el asunto de Abu Dabi y, de repente, el precio empezó a subir.
Algunos dicen que es una coincidencia, otros creen que detrás hay algo mucho más turbio. Capital de Oriente Medio + mecanismo de quema de tokens + una noticia positiva inesperada; la combinación, desde luego, es interesante. Pero la verdad de todo esto, probablemente solo la sepan los implicados.
Así es el mercado: a veces, una sola noticia puede cambiar el destino de la distribución de los tokens.