Llegan noticias de gran impacto durante la madrugada: Kevin Hassett, uno de los principales candidatos a presidir la Reserva Federal, se ha pronunciado públicamente a favor de seguir bajando los tipos de interés. Esta declaración ha caído como una bomba en un lago en calma y Wall Street ha estallado de inmediato.

No lo has leído mal: aquellos grandes bancos que hace apenas unos días clamaban por una "pausa en las bajadas de tipos" han tirado por tierra sus propias previsiones de la noche a la mañana. JPMorgan, Morgan Stanley, Nomura Securities, Standard Chartered... todos han cambiado su discurso y ahora casi todos coinciden: esta semana habrá una bajada de tipos de 25 puntos básicos, está prácticamente asegurado.

El mercado ha reaccionado aún más rápido. Los datos del "FedWatch" de la CME muestran que la probabilidad de una bajada de tipos esta semana ya se ha disparado al 89,6%. ¿Y el 10,4% restante? Probablemente sea gente que ha hecho clic mal por accidente.

¿Por qué este cambio repentino?

Basta con mirar los datos económicos de noviembre para entenderlo: el sector privado perdió directamente 32.000 puestos de trabajo, el peor dato mensual desde marzo de este año y mucho peor de lo esperado. Con un mercado laboral debilitado, ni la Reserva Federal más dura puede mantenerse inflexible.

Las palabras de Hassett también dejan entrever otra cosa: el equipo de Trump está a punto de lanzar "muchas noticias positivas" y el rendimiento del bono a diez años "aún tiene mucho margen para bajar". ¿Qué significa esto? Que el próximo paquete de medidas de política económica podría ser incluso más contundente de lo esperado.

Pero lo realmente interesante no es si bajarán o no los tipos, sino tres detalles clave:

1. Lucha interna: se dice que cuatro miembros de la línea dura votarán en contra, y la gobernadora Milián incluso podría proponer una bajada directa de 50 puntos básicos.
2. Hoja de ruta para el próximo año: Goldman Sachs prevé que primero se hará una pausa, para luego volver a bajar en marzo y junio, con un objetivo final de situar los tipos entre el 3% y el 3,25%.
3. Tono de la política: la declaración de Powell mañana será decisiva para marcar el rumbo del mercado en los próximos meses.

Para el mercado cripto, el aumento de las expectativas de bajada de tipos suele ser una señal de mayor liquidez. Pero no te alegres demasiado pronto: lo importante será ver si la Reserva Federal introduce advertencias en su comunicado, como un énfasis en la "dependencia de los datos" o un límite al número de bajadas de tipos para el año que viene.

En resumen: la bajada de tipos está casi asegurada, la verdadera incógnita es qué pasará después.