Después de nueve años de experiencia en el trading, si tuviera que decir cuál es la habilidad más esencial, la respuesta podría sorprender: es "esperar".

Mucha gente piensa que los traders dependen de predecir con precisión la dirección del mercado. Pero la realidad es que el análisis de mercado ocupa una proporción ínfima en el trading real. Un trader experimentado pasa la mayor parte del tiempo haciendo una sola cosa: esperar.

¿Esperar a qué? Esperar ese momento en el que la ventaja de trading se manifiesta con fuerza.

El mercado fluctúa todos los días: algunas señales muestran que la fuerza compradora domina, otras sugieren que mandan los vendedores. Cuando las señales compradoras superan claramente a las vendedoras, lo más probable es que el mercado se incline hacia los compradores, y viceversa. Esos momentos de ventaja evidente son cuando debemos actuar.

Este conjunto de criterios compuesto por varias condiciones se denomina "estrategia de trading" en la jerga del sector. Solo cuando el mercado cumple con la estrategia, las probabilidades de éxito alcanzan su punto máximo tras entrar en la operación.

Algunas personas operan de otra manera: analizan sin parar, predicen constantemente y ejecutan operaciones con frecuencia. Creo que esto es un malentendido de la naturaleza del mercado. La mayor parte del tiempo el mercado es aleatorio y la volatilidad carece de patrón. Nuestro objetivo no es ganar en cada movimiento, sino entrar de forma decidida cuando surgen oportunidades con alta probabilidad de éxito.

Por poner una analogía: el trading es como la caza. Nuestra tarea no es anticipar hacia dónde correrá la presa (eso es imposible de determinar), sino apretar el gatillo cuando la presa entra en el punto de mira.

Después de un tiempo en el mercado, comprendes que el núcleo del trading es esperar. Aprender a filtrar aquellos movimientos caóticos y solo actuar cuando tienes más confianza te hará avanzar a otro nivel.