Este viaje a Dubái ha sido el broche perfecto para 2024. La Semana Blockchain organizada por una importante exchange se ha preparado con mucha dedicación; desde el espacio hasta la agenda, se podía sentir la sinceridad del equipo.

Como ganador durante tres años consecutivos del premio a "autor destacado de la plaza" y "top trader" 🏆, esta vez asistí como invitado, y el mayor premio no fue el trofeo, sino reencontrarme con caras conocidas y mantener conversaciones frescas. El sector no es tan grande como parece; encontrarte con viejos amigos en un país extranjero aporta una sensación de confianza muy especial.

Lo que más me emocionó fue volver a ver al fundador de la plataforma y empresario chino más rico, a quien en privado llamo "el primo mayor". Aquella cena familiar en Shanghái hace tres años aún la recuerdo perfectamente; su actitud cercana me dejó huella. Tres años después, reencontrarnos en Dubái y ver que sigue igual de accesible, me confirma que ese carisma personal es, probablemente, la lógica de base que ha llevado a la plataforma al top mundial.

La reunión con la comunidad hispanohablante organizada por la co-CEO, la señora He (, a quien todos llaman "la jefa" ), también fue muy enriquecedora. Sus looks diarios estaban muy pensados, predominando el verde—bromeé diciendo que parecía la señal de “subida en verde” en nuestras interfaces de trading, una coincidencia curiosa. En la sesión de preguntas y respuestas respondió con sinceridad, sin tópicos oficiales, y se notaba su compromiso con la comunidad. Para que la plataforma alcance el objetivo de mil millones de usuarios, ese empuje del equipo ejecutivo es clave.

El equipo de operaciones —Echo, Hanson, Sisi, KIM— organizó perfectamente la comida, el alojamiento y el transporte; estos detalles marcan la diferencia.

En la ceremonia de premios me encontré con muchos conocidos: Yan Chi sigue igual de carismático; Tang Hua, moderador, merecidamente ganó el premio a "investigador independiente" y sigo de cerca sus informes; el "director" de la generación Z tiene ideas tan frescas que hasta yo, un veterano, me siento superado; el estilo de vestir del "príncipe", las anécdotas de los "hermanos Nut", la disciplina de "Link" manteniendo sus tokens desde los 100U, la voz de "Miqiu", la fuerza de Remi de Taiwán con más de 300.000 suscriptores en YouTube, y el carisma de "Zhu Yidan"… todos tienen su propio brillo.

Este viaje a Dubái me ha confirmado una vez más: en la industria Web3, la tecnología y el capital son importantes, pero lo que realmente te hace quedarte son esas conexiones humanas con calidez.