Desarrollo de última hora en el sudeste asiático: Las Filipinas avanzan con una propuesta para establecer una reserva estratégica de Bitcoin. Según los últimos informes, el plan contempla una adquisición gradual de 10,000 BTC repartidos en un período de cinco años.

Esto marca otra posible entrada para la acumulación a nivel de estado nación en el espacio cripto. ¿Qué hace esto particularmente interesante? El mercado aún no lo ha asimilado por completo. Mientras que minoristas e instituciones han estado observando las jugadas en tesorería corporativa, las estrategias de riqueza soberana están emergiendo discretamente como una nueva fuerza.

El marco propuesto sugiere un enfoque medido en lugar de compras agresivas, lo cual podría ser más sostenible a largo plazo. Si se implementa, las Filipinas se unirían a una lista pequeña pero en crecimiento de países que están activamente formando posiciones en activos digitales a nivel estatal.

El momento también merece la pena ser destacado. A medida que los activos de reserva tradicionales enfrentan presiones inflacionarias y incertidumbres geopolíticas, la diversificación en Bitcoin representa una estrategia de cobertura que está ganando terreno más allá del plan de El Salvador. La pregunta ahora es: ¿seguirán otros países de la región el ejemplo? El efecto dominó podría transformar por completo nuestra forma de pensar sobre las reservas soberanas.