El Congreso de EE. UU. acaba de presionar a la SEC para que apruebe Bitcoin y criptomonedas para cuentas de jubilación 401(K). Esto podría ser un cambio de juego.

Durante años, los planes de jubilación tradicionales han estado ligados a acciones y bonos. Ahora, los legisladores están diciendo al regulador: es hora de abrir la puerta a los activos digitales. Si esto se aprueba, millones de estadounidenses podrían asignar parte de sus ahorros para la jubilación en Bitcoin y otras criptomonedas a través de planes patrocinados por el empleador.

¿Las implicaciones? Enormes. Estamos hablando de billones que se encuentran en cuentas 401(K) que potencialmente podrían tener exposición a los mercados de cripto. La adopción institucional alcanzaría un nivel completamente nuevo. Fondos de pensiones, gestores de jubilación, custodios—todos tendrían que construir infraestructura de la noche a la mañana.

Claro, hay riesgos. Preocupaciones por la volatilidad, desafíos en la custodia, debates sobre la protección del inversor. Pero la señal aquí es clara: las criptomonedas ya no son un experimento marginal. Están tocando la puerta de la planificación de jubilación en Main Street.

Mantén un ojo en la respuesta de la SEC. Si el presidente Gensler (o su sucesor) da el visto bueno, podríamos mirar atrás a este momento como el momento en que las criptomonedas realmente entraron en el establishment financiero.