El juez ordenó a un inversor de BTC que revele una clave privada de BTC de 124 millones de dólares, quien fue condenado a dos años de prisión el año pasado por fraude fiscal.

El mes pasado, Frank Richard Ahlgren III, un inversor temprano en BTC, fue condenado a dos años de prisión por fraude fiscal relacionado con la venta de criptomonedas. El juez federal Robert Pitman dictaminó el lunes en una corte federal en Austin, Texas, que Ahlgren debe pagar una compensación penal de aproximadamente 1 millón de dólares al gobierno. Debe entregar la llave privada y revelar cualquier dispositivo utilizado para almacenar la llave privada, así como también revelar todas sus cuentas de criptomonedas.

En diciembre del año pasado, el fiscal solicitó al juez que obligara a Ahlgren a revelar el paradero de al menos 1,287 BTC transferidos a través de un servicio de “mixing” en 2020. El valor de estos BTC ha aumentado más del doble en el último año y ahora supera los 124 millones de dólares. Ahlgren ha aceptado pagar una indemnización de 1 millón de dólares a Estados Unidos para compensar las pérdidas fiscales causadas por no informar correctamente las ganancias de capital de la venta de 3,7 millones de dólares en BTC. El fiscal afirmó que utilizó parte de las ganancias para comprar una casa en Park City, Utah.

El fiscal en la solicitud afirma que la propiedad de Ahlgren no se puede incautar mediante medios físicos convencionales. El gobierno solicita no solo restringir cualquier criptomoneda según la orden del tribunal, sino también obtener la llave privada para acceder a ella, de modo que nadie más pueda moverla. Si la llave privada se pierde o se destruye, la criptomoneda no se puede recuperar. La orden del juez establecía que Ahlgren no podía “despilfarrar”, transferir o vender ninguna propiedad sin la aprobación previa del tribunal, pero que podía pagar “los gastos mensuales normales de subsistencia”. Ahlgren se declaró culpable el 12 de septiembre del año pasado y fue sentenciado el 12 de diciembre. [Bloomberg]