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Limoneira tropieza en el tercer trimestre de 2025
Limoneira, el gigante de limones y aguacates, acaba de soltar sus números del tercer trimestre fiscal 2025. No pinta bien. Los ingresos se desplomaron y las ganancias... bueno, mejor ni hablar.
Veamos:
- Ingresos: -25%. Aterrizaron en 47,5 millones de dólares.
- Ganancias por acción: De $0,42 a ($0,02). Ouch.
- EBITDA ajustado: Se esfumó un 78,3%.
Los aguacates se portaron fatal, -38,8%. Los limones tampoco brillaron. Parece que los árboles de aguacate decidieron tomarse un descanso este año. Cosa de la naturaleza, dicen.
Pero ojo, la directiva no se rinde. Mantienen sus pronósticos para el año. Ambiciosos, ¿no? Esperan mover entre 4,5 y 5,0 millones de cajas de limones frescos y unos 7,0 millones de libras de aguacates.
Limoneira sigue con sus planes. Andan coqueteando con Sunkist para vender cítricos juntos. Podría ahorrarles 5 millones al año. No está mal.
Y siguen con sus proyectos inmobiliarios. En abril, su joint venture les soltó 10 millones de dólares. Un respiro.
En fin, Limoneira la está pasando canutas con sus cultivos, pero no tira la toalla. Confían en sus estrategias y en diversificar. Veremos qué pasa. El Salvador ha decidido repartir sus Bitcoins en 14 nuevas carteras. Parece una movida interesante. Quieren mejorar la seguridad, dicen. Algo sobre amenazas cuánticas.
La Oficina de Bitcoin lo anunció. Dividir los fondos, dicen, protege contra ataques cuánticos. Suena un poco a ciencia ficción, ¿no?
Hablan de ordenadores cuánticos rompiendo claves. El famoso algoritmo de Shor. Afecta a muchas cosas, no solo Bitcoin.
Ahora, cada cartera tendrá unos 500 BTC. No está mal. Limitan el riesgo, supongo.
Un panel público para monitorear. Transparencia, dicen. Seguridad también.
Antes, todo en una sola cartera. 6,274 BTC. Ahora, repartidos.
Algunos expertos aplauden. Otros dicen que es exagerado. Los ordenadores cuánticos aún no son tan potentes.
El FMI anda por ahí, cuestionando. Dicen que El Salvador no compra Bitcoin desde febrero. Genera dudas.
En fin, El Salvador sigue dando que hablar con sus movimientos crypto. Veremos qué pasa.